miércoles, 6 de enero de 2010

Hoy pienso realmente en los que menos tienen. Ellos son el sostén de la pobreza pues si no existieran, estarian muertos. ¿Quién es demasiado mejor que alguien para imponerle un determinado nivel social?, se trata de un destino, el cual uno nunca elige, esta prefijado o simplemente se dá. Pero no porque sea un destino debemos cruzar los brazos y mirar la realidad desastroza en la que la mayoria es menos y la minoria es mas, mirandolo desde el punto de vista de poder económico y político. Tenemos que ser testigos de la degradación del hombre, pero tambien tenemos que ser actores de la humanidad, interceder en ella, tratando de sumar y aportar al hombre, pues es el hombre el sostén de la humanidad.

Una idea se manifiesta en muchas personas, es ahí que surge la ideología y las discrepencias entre los hombres. Por esto mismo se generan las luchas de poder, entendiendose como ideales en conflicto, pero nunca olvidandose del sistema económico que es el que genera las mayores disputas y al sector corrupto. Porque no solo alcanza con imponer la idea mas justa para el hombre, sino que el hombre debe vencer su lado mas codicioso y corrupto. Encontrase con su liberación, que implica libertad mental, apartarse de su ambición y poder ver la igualdad social.

Pensemos en positivo siempre, no caigamos en la negatividad que imperia, sobre todo la mejor revolución la hacen luchadores optimistas, que nunca caen en esa negativadad y viven con la consiencia tranquila de guardar en sus pensamientos la causa del hombre, sin relajarse sobre un manto de dolares, y gritando siempre su verdad aunque las burguesias parescan sordas. Esa tranquilidad mental es interior porque nadie puede estar tranquilo siendo reprimido, la tranquilidad de defender a la clase trabajadora y explotada se manifiesta al exterior en forma activa, eso puede llegar a la violencia incluso, teniendo en cuenta que las cúpulas del poder económico pertenecen a un imperio facista y violento.

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